El Escuadrón 731 fue un programa encubierto de investigación y desarrollo de armas biológicas del Ejército Imperial Japonés, que llevó a cabo algunos de los más horribles crímenes de guerra cometidos en la Segunda Guerra Mundial
El Teniente General Shirō Ishii fue el líder del Escuadrón 731, ya que tenía un expediente excelente aunque se dice que tenía unas costumbres extrañas como tratar a las bacterias como mascotas
Entre los sujetos de prueba, aparte de hombres y mujeres de edad adulta, se encontraban niños, ancianos y mujeres embarazadas. Muchos experimentos y vivisecciones fueron realizadas sin el uso de anestésicos.
Si te preguntas que es la vivisección, es la disección de un animal aún vivo. Su objetivo es poder observar el funcionamiento de los órganos.
Además de las vivisecciones, hubo ensayo de armas, experimentos con agentes patógenos, ataques biológicos, etc.
Las operaciones y los experimentos continuaron hasta el final de la guerra donde la unidad tuvo que abandonar su trabajo deprisa para huir a Japón ya que las instalaciones se encontraban en China.
Al final de la guerra, EEUU concedió secretamente inmunidad a los médicos del Escuadrón 731 a cambio de proveer a los Estados Unidos todos los datos sacados de los experimentos realizados. Por lo que muchos de los científicos implicados en el Escuadrón 731 continuaron con sus carreras en política, negocios y medicina. Como si nada hubiera pasado
Para finalizar os dejo una película que trata sobre el Escuadrón 731 titulada “Los hombres detrás del sol”